Claveles con espinas y sin espuela (pá ir pasando)

Escapándole por pies al tiempo he decidido poner...le una barrera al conjunto donde se encuentra el estúpido colegio de niños infelices por acariciar, que buscan encontrando su propia soledad en los lagares tranquilos y ajenos a su propiedad.

Tomándole el pulso a mi pè, he decido encontrar la manera de aullarte al oído sin que me duela, sin ser parte de la contratante del contrato o el contratador, haré feliz a tus partes sin hacerte desdichada… la piel y en lo que ella escondes.

Siempre quise volar sin espuelas, en esta cabalgadura extraña en que la corriente me lleva al eterno despertar, de ahí este relicario que parece no tener sentido en el principio y que al fin es sólo un propósito u declaración de intenciones en el que me hallo desnaufragando.

Quiero seguir flotando en este lecho, lechoso espero, de amarguillos por probar.
Y buscaré con esmero en la próxima victoria poderle noticias dar. Le quitare tres plu_más al gallo y le pondréle al gato mi sombrero.

Aqui y ahora

Evitandole al presente
sufrimentos pasados
escuchando con deleite
la musica, aquí, a tu lado.

Esprimiendo cada zumo
en naranjas completas
añorando desde el humo
las palabras obsoletas

Desnudito en ningun regazo
esclavito de tus brazos
voy pasando las horas
en lo que llegues a mi alcoba

Es pistola de deseos
verte en camiseta
cruzar de madrugada
desde un tiesto a la mazeta

Y en cada copla,
y en cada estrofa.
Y en la delicada maleta
forrada de barro
que cubre tus nalgas
vivo entero en cuero
y amo.
Eso espero.

Al cambio de paso
de entre sombras
estoy volviendo a descubrirle
la miel al dolor.

Vistiendome pasos de ayer
voy buscando caminos y hayo
emociones que notros dias foram de él.

Mixturado o passado e o presente
na conta do futuro,
lebro-me dos teus olhos
em cada noite que escurece.

Á luz das lampadas
o chao é vermelho
e o ceu azui como foi o ceu.

A sangue que correu
foi parar até os meus pés,
e volta a corre leva-me afogado...

Noche de avellanas

Entrando en tiempo de avellanas
todo el dolor que sufre una frente enfrente a tu piel
viene dandole espesor al empuje de las olas.
Masticando la arena que decascarara horas en la mano
en las que el explendor, explende,
las heridas sangran mientras amanecen
en lo que el romanticismo adolece de retiro.
Apretando de pasado esprimiendo de futuro
acabando por empezar a caminar hacia tus brazos.
Negandole un beso a este corazão que piensa estar cansado,
o dolido, o algo amargo sin mas.
Van y vuelven en redondo cada uno de los instantante en que te echo de menos
van y mueren en silencio, sin provacar mas que interno ruido,
ruido de escaleras, que se acaban por subir...