martes, enero 16, 2007

Hoy

A veces tengo cierto sentido de inferioridad,
y erroneamente buscon cobijo en paraguas mas grandes que el mio.
Al rato, doyme cuenta que los picos de mi parasol, aun abierto,
molestan al benefactor cada vez que me acerco a su oido.

Algunas veces me encojo,
me agacho, me intento mentir,
algunas veces rodeo la piedra,
alguna veces me olvido del fin.

No quisiera llamar a tu puerta para ver que llevas puesto,
no quisiera se rama de árbol ajeno,
no quisiera, pensaran en mi como competidor en nada.

Agradezco los esfuerzos de los necios,
por probar a darr consejos.
Envidio las tres palabras justas que desechizan el echizo.

No comprendo a los justos,
no aliento las injusticias.
Espiro aire por la boca como todos los mortales, menos dos.
Quien dijo infinito,
quien numera las emociones...
¡¡¡Como se te ocurre contar los besos...

Visteme de extraño, que quiero parecerle sabio a los oidos sordos
Cuentame los pasos que doy hacia la luna
cortame el pelo ¡¡ Si puedes !!

Me gustaria el aire puro en la cara,
las palmas de las manos al viento,
y la calva...
la calva, desnuda...