lunes, febrero 16, 2009

Carta Abierta


En un sobre sin pega,
en una carcel sin puertas,
en un convento sin monjas,
y en un israel sin palentinos,
aguardan las horas al reloj,
fecundan las madres a sus vientres,
escriben los presos a su cárceles contandoles la gloria
aventajan en tres cuerpos las nuevas motos a las que vendran con medio cuerpo de mas,
venderemos pijamas en agosto para los frios criticos de principios de septiembre
y le bailaremos el agua a los tiestos mientras sustentes nuestras raíces.
Vestimenta de domingo que se confiesa,
ostia en misa en toda la cara.

Abré perdido las ganas de correr,
abré olvidado las fuerzas en los pies,
estaré jodido para volver,
siempre supe lo que sabía,
siempre entendí lo discreto.

Nos desequilibra tanto como nos hace falta lo desconocido de las pautas que sabemos seguir,
nos abandonan las fuerzas de cuando en cuando para luchar contra el capital.
Nos vestimos de domingo cada sábado y salimos a buscarle tres pies al gato con una de conejo en la mano por si acaso.
Olvidamos leer lo que escribimos para recordar siempre lo que pensábamos en las escuela al escupirle en ojo a la maestra cinco minutos antes del recreo.
Escucharé las palabras de quien tenga a bien emitirlas en mi direccion, daré mi brazo a torcer sólo cuando me abandone la razón y en el silencio del asfalto que en estos momentos me rodea sembraré tiestos boca abajo para iluminarle a las plantas de los pies el camino a la azotea.